El anuncio hecho por Jaume Roures en Catalunya Radio acerca de la fecha del Barcelona - Real Madrid ha producido dos tipos de reacciones: por un lado, aquéllos que ven la vida desde el prisma culé o desde el madridista se han apresurado a decir, en su mayoría, que el clásico debería jugarse en fin de semana. Por otro lado, los aficionados de otros clubes defienden que si un lunes se puede jugar un Mallorca - Levante, un Atlético - Osasuna, un Sevilla - Valencia o un Valladolid - Albacete, no hay razón para que Barcelona y Real Madrid no puedan hacerlo. No parece justo que ellos se lleven la mayor parte del dinero procedente de la televisión y sean los demás los únicos que sufren los inconvenientes. Pero todos ellos tienen algo en común: les parece mal que haya fútbol los lunes.
Disiento de su opinión, al menos en parte. Puedo admitir es un mal día para un Mallorca - Levante o para un Valladolid - Albacete, sobre todo para los aficionados del equipo que actúa como local, no así para el visitante. Sin embargo, me parece que un lunes es una buena fecha para un partido de interés mundial como es el clásico que se jugará el próxima día 29, máxime teniendo en cuenta que el domingo no podía disputarse debido la coincidencia con las elecciones catalanas, al ser muy complicado organizar dos dispositivos de máxima seguridad en una misma jornada en un mismo lugar. Argumentaré mi postura:
- Los Barcelona - Real Madrid son partidos que generan interés a nivel internacional y que prácticamente paran el país. Cuando se juegan en sábado, las recaudaciones de cines, teatros o restaurantes se resienten significativamente. En cambio, los bares en los que se emite el partido, sobre todo si éste es de pago, consiguen hacer una caja extraordinaria. Jugándose en lunes los bares hacen la misma caja, porque quién lo quiera ver y no tenga GolT o Canal+Liga en casa tendrá que ir igualmente a un bar, y además los teatros, cines o restaurantes no pierden la recaudación del sábado, habitualmente el día más fuerte de la semana en cuanto a ingresos.
- A nivel social o personal, que un gran partido como es el Barcelona - Real Madrid puede acarrear problemas en las relaciones sociales y, sobre todo, en las de pareja. El partido coincide con cenas previstas desde hace meses, celebraciones de cumpleaños, aniversarios, etc. Siempre hay quién en estas ocasiones debe elegir entre acudir al acto social o ver el partido. O acudir al acto social y escabullirse para ver lo que pueda del partido. Jugándose en lunes se evitan estos problemas.
- Desde el punto de vista de la proyección internacional del partido y de la Liga BBVA el lunes es la mejor fecha. Difícilmente coincidirá con ningún otro partido que le pueda hacer sombra en toda Europa. Tampoco es mal horario para quién lo quiera ver desde América, pues coincide más o menos con la hora de comer allí. Habrá quien diga que no es buen horario para los países asiáticos (hay que ver la preocupación que ha entrado de un tiempo a esta parte con la promoción del fútbol en Asia y la de tonterías que se dicen al respecto: hablaré de ello en otro post), pero es exactamente igual de malo que si se jugase el domingo a las nueve de la noche.
- Desde el punto de vista deportivo, también es la mejor fecha. Los dos equipos llegarán más descansados a ese partido que a ningún otro de los partidos de Liga que han disputado hasta ahora. Si no hay un gran espectáculo, nadie le podrá echar la culpa al cansancio o a la acumulación de partidos.
- Televisivamente, se obtienen mejores audiencias en días de diario que en fin de semana, como prueba el hecho de que, por ejemplo, de las doce retransmisiones deportivas más vistas en España en el año 2009, que fueron a su vez los doce programas más vistos de ese año, ninguna tuvo lugar en fin de semana. Esto está directamente relacionado con los argumentos anteriores: los aficionados tienen mayor facilidad para seguir un partido si éste se disputa entre semana que si se disputa en fin de semana.
- Los únicos que se pueden quejar realmente por la fecha del partido son algunos socios del Barcelona, concretamente aquellos que no tengan su residencia en Barcelona y se desplacen desde fuera para ver los partidos. Pero esta situación ya se da sin que nadie proteste con los partidos de Liga de Campeones, que se juegan en martes o miércoles y prácticamente a la misma hora.
@fjaz79