miércoles, 29 de diciembre de 2010

Reflexiones sobre el cierre de CNN+

Lamentable humana e informativamente, inevitable desde el punto de vista empresarial


Suelo utilizar este espacio simplemente para hablar de temas deportivos pero hoy haré una excepción para dar mi visión sobre el cierre de CNN+. Vaya por delante que su cierre me parece una doble tragedia. Primero, desde el punto de vista de humano: que 150-200 personas vayan al paro en esta época es evidentemente una pésima noticia. Y segundo, como ciudadano me parece también una muy mala noticia: dispongo de un medio de comunicación menos para informarme. Y no de uno cualquiera, sino de uno cuyos reportajes, cercanía al lugar de los hechos y profesionalidad sobresalía en la mayoría de los casos sobre los demás.
Como persona y como ciudadano me siento pues decepcionado por el cierre de CNN+, pero reconozco que si fuera accionista de PRISA o TeleCinco mi sensación sería más bien de alivio. Según ha informado la propia PRISA las deudas generadas por CNN+ en los últimos tres años ascendían a 40 millones de euros y las previsiones para los próximos años eran similares. Es obvio que TeleCinco puso como condición para la fusión-absorción el hecho de que CNN+ debía cerrar. Y también es obvio que PRISA aceptó obligada por su precaria situación, derivada de una pésima gestión anterior por parte de Jesús de Polanco, que ahora sus herederos tratan de salvar como pueden con extrañas alianzas con Telecinco y Liberty. El hecho de que los trabajadores del extinto canal se manifestasen delante de la sede de PRISA y no de la de Telecinco me parece significativo: la decisión final del cierre es y deriva de los errores de PRISA, aunque se vista como una imposición de TeleCinco: a TeleCinco le da igual aparecer como el malo de la película, como el que no se preocupa de la calidad de sus contenidos. Lleva veinte años siguiendo esa política y, por triste que sea, le ha resultado muy rentable.
Al presenciar el fin de las emisiones del canal de noticias no puede evitar recordar el fin de emisiones de Antena 3 Radio en junio de 1994. Recuerdo como grabé en una cinta de BASF el último programa de deportes a nivel local en Valladolid y como Julio Ares (hermano de Javier) detallaba, dando cifras, como los ingresos de Antena 3 en Valladolid habían sido superiores a los de Radio Valladolid de la Cadena Ser en los últimos años e incluso en el último partido que retransmitió: un Valladolid-Toledo. Esa es una de las diferencias entre el cierre de CNN+ y el de A3Radio: A3 era rentable. Otra diferencia está en que A3 no era un medio de comunicación más, era un medio de comunicación líder, creador de opinión, muy incómodo para el poder y mayoritario. Su cierre no estuvo basado en criterios empresariales, sino en criterios económicos: la segunda cadena de radio compró la primera con el único objetivo de cerrarla y hacerse con sus frecuencias. Su cierre fue ideológico, político, mucho más grave incluso que el de CNN+. Y hay una tercera diferencia entre ambas: muchos de los que ahora lamentan con razón el cierre de CNN+ callaron cuando Antena 3 fue cerrado. Por poner un ejemplo, nadie recuerda que Iñaki Gabilondo protestase cuando el cierre de la emisora de radio líder y la puesta a su disposición de sus frecuencias terminó de catapultarlo al liderazgo de la radio española.
Finalmente, una última reflexión acerca de rentabilidades televisivas. Hay quién se pregunta cómo CNN+ no podía ser rentable mientras otros canales temáticos de noticias como Libertad Digital, Veo o Intereconomía sí lo son. Que nadie busque razones ideológicas, los motivos tienen que ver simplemente con los costes que asumen o asumían unos y otros. CNN+ tenía unos costes de personal y de producción muy superiores a los que asumen cualquiera de los otros canales: corresponsalías, muchos reportajes de producción propia etc. Eso supone mucho dinero. Por su parte, los principales programas de las otras tres cadenas son tertulias y las tertulias son lo más barato de la televisión: un decorado, cuatro personas sentadas, un par de cebos y ya está. El resto de programas son informativos elaborados a partir vídeos de agencia, películas de bajo coste y repeticiones. En el caso de Libertad Digital, las tertulias que se emiten por televisión son las mismas que emiten en la radio: así pues, mayor sinergia y mayor ahorro. No entro en la calidad de los contenidos ni en la ideología, simplemente busco una explicación económica y está claro que CNN+ vivió muchos años por encima de sus posibilidades.

martes, 21 de diciembre de 2010

Mouniño

La permisividad de los rectores blancos con el portugués puede volverse en su contra

Uno tiene una edad en la que muchos familiares o amigos con los que se tiene buena relación van teniendo niños. Y sucede con frecuencia que, cuando uno hace una visita o es visitado por esos amigos o esos conocidos observa el comportamiento del niño: los hay más tranquilos, más inquietos, con más o menos curiosidad por lo que les rodea, cariñosos, ariscos… A veces, pocas, pasa que uno se encuentra frente a un niño en el que uno observa comportamientos extraños: coge cosas y las tira, se da cabezazos contra las paredes, se pone a chillar sin venir a cuento etc. En uno de esos momentos, mientras presencias como el niño hace cosas que no tienen explicación, el padre de la criatura se acerca y te dice: “Es superinteligente, siempre está imaginando, creando, buscando explicaciones a lo que le rodea…”. En ese momento piensas: “Pues a mí me parece que entre una gallina y este niño, la gallina es bastante más lista”. Pero por no armarla te callas.
Con Mourinho pasa lo mismo: se argumenta que es un hombre con una inteligencia superior, que tiene todo bajo control y que mide al milímetro cada paso que da. A mí, como en el caso del niño anterior, simplemente me parece que está como una regadera.
Y ya no es que esté como una regadera, sino que el niño ha escapado al control del padre. Cuando el niño era pequeño, fue a visitar a unos familiares que tenían su salón decorado con jarrones que costaban una pasta. El niño, fiel a su costumbre de tocarlo todo, cogió dos jarrones, los puso a rodar sobre la mesa y acabaron en el suelo hechos añicos. El padre dijo entonces que qué clase de personas eran esas que sabiendo que iba un niño a su casa dejaban los jarrones a su alcance. Otro día fueron el niño, acompañado de su progenitor A y su progenitor B, a visitar a unos amigos que tenía un perro. El niño se pasó media tarde intentando meterle un palo por el culo al perro, hasta que el perro se hartó y le ladró. Los perros, normalmente mejores personas que los humanos, no suelen pasar de ahí. El niño se asustó y el padre dijo que qué tipo de gente era esa que dejaba un perro suelto por casa sabiendo que allí había un niño. En otra ocasión, una tía mayor de la familia fue a visitar al pequeño. La mujer, ya mayor, se movía con dificultad. Mientras caminaba por el pasillo, el niño pasó corriendo a su lado con tan poca precaución que la empujó y la tiró al suelo. El padre, eximiendo de toda culpa a su pequeño masculló: “Esta vieja torpe lo que tenía que hacer era quedarse en su casa”. Y así, trufada de “divertidas” anécdotas como estas, transcurría la vida del niño.
Cuando el niño ya tenía una cierta edad su padre organizó una cena en casa a la que invitó a amigos y familiares. El niño jugaba feliz por casa y cuando nadie le miraba, encontró un bote de barniz en un armario. Ni corto ni perezoso se lo llevó a su habitación, lo abrió y empezó a decorar con él el estuco de su habitación. Como era un niño muy limpio, para no mancharse se puso por encima una camisa de su padre que le había costado más de 200 € y la decoró también oportunamente. Cuando el padre se enteró, esta vez sí se enfadó y reprimió al pequeño. Este, poco acostumbrado a reprimendas, y delante de los invitados, le contestó: “Cállate. Como dice mamá, eres un calzonazos y si te aguanto es porque traes dinero a casa” ¿Qué podía hacer el padre entonces? Castigarle: sí, pero eso no arreglaría la vergüenza que le había hecho pasar. Dejar pasar el incidente como si no hubiera escuchado nada: también, pero no mitigaría su vergüenza y supondría asumir que el niño había escapado a su control.
Algo semejante es lo que ha sucedido al Madrid con Mourinho: cuando los perjudicados de sus acciones han sido Mallorca, Levante, Español, Sporting, Barcelona, Emery, Preciado, Villa, los árbitros, la UEFA… la culpa era de los perjudicados. Ahora el niño se revela contra el propio Madrid. Y cualquier solución es mala. Si le consientes, admites que ya no puedes ejercer ningún control sobre él, y si no le consientes, te puedes quedar sin niño.
Entre los padres irresponsables y los rectores del Real Madrid hay una diferencia: el padre no puedo elegir el carácter de su hijo, aunque sus decisiones tampoco ayudaron a hacer de él alguien educado. El Real Madrid se hizo con los servicios de Mourinho, no ya sabiendo como era, sino precisamente por cómo era. En el pecado lleva la penitencia.

@fjaz79

sábado, 18 de diciembre de 2010

24 años de descrédito

Desde la llegada de Jesús Gil en el 87 el Atlético ha vivido la peor etapa de su historia

El 26 de junio de 1987 Jesús Gil y Gil ganó la elecciones al presidencia del Atlético de Madrid, convocadas tras la muerte de Vicente Calderón en marzo de ese mismo año. El palmarés del equipo rojiblanco contaba por aquel entonces con 8 Ligas, 6 Copas del Rey, una Recopa de Europa y una Intercontinental. Desde entonces ha ganado 1 Liga, 3 Copas, una Uefa Europa League y una Supercopa de Europa. Vistos solamente esos números, podría pensarse que la línea seguida por el Atlético en estos últimos 24 años ha estado en consonancia con los 84 años anteriores de su historia. Pero este sería un caso más en el que una estadística sesgada nos llevase a formular conclusiones equivocadas.
Porque en estos años las sombras vividas por los aficionados colchoneros han superado con creces a las luces. Hay datos que lo corroboran:
- durante estos últimos 24 años, el Atlético ha superado su peor racha histórica de tiempo sin conseguir un título. El anterior récord negativo quedó establecido entre los años 1929 y 1940. La nueva marca ha quedado fijada en 14 años, superando por tres a la anterior: desde 1996 hasta 2010.
- entre los años 2000 y 2002 el Atlético jugó en 2º división, hecho que no sucedía desde hacía casi 70 años
- en estos 24 años el Atlético de Madrid ha vivido más de 40 cambios de entrenador, más de los que había vivido en los 84 años anteriores y muchos más que cualquier otro equipo español en este mismo periodo. Por el banquillo rojiblanco han pasado nombres como José luis Romero, Pastoriza, Pepe Murcia, Bianchi, Ferrando, Marcos Alonso, Zambrano o Maturana. Sólo Luis Aragones, Antic, Aguirre y Quique Sánchez Flores lograron permanecer en el banquillo rojiblanco durante más de una temporada completa.
- el equipo rojiblanco lleva 11 años y 18 derbis consecutivos sin lograr vencer al Real Madrid
- en estos años han pasado por el Atlético jugadores como Kosecki, Andrei Frascarelli, Celso Ayala, Costinha, Dobrowolski, Emerson, Fabiano Eller, Fagiani, Gronkjaer, Hugo Leal, Iván Rocha, Pedro, Armando, Parra, Javi Moreno, Juan Gómez, Juanchi Glez., Lukic, Maguy, Moacir, Musampa, Nagore, Nikolaidis, Nimny, Njegus, Novo, el Pollo Olivera, Paulino, Pernía, Pilipauskas, Richard Núñez, Rodax, Seitaridis, Sinama, el Pato Sosa, Mario Tilico, Tomic, Torrisi, el Tren Valencia, Venturin, José Luis Villarreal, Yankov, Cléber Santana, Juanito y alguno más que ni tan siquiera los propios aficionados rojiblancos recordarán.
- el Atlético de Madrid antes de 1987 era un equipo que temporada tras temporada se clasificaba entre los 5 primeros de la liga. Desde 1996, año del doblete, el Atlético ha sido dos veces 4º, una vez 5º, tres veces 7º, una vez 9º, otra 10º, otra 11º, otra 12º, otra 13º y 19º el año del descenso. Además, jugó dos años en segunda.
Todos estos datos han contribuido a una lenta pero continua merma del prestigio deportivo del equipo rojiblanco. A la llegada de Gil, pese a que el Athletic de Bilbao presentaba un mejor palmarés, el Atlético era considerado el tercer equipo de España por afición, presupuesto y resultados, a no mucha distancia del FCBarcelona, que sólo sumaba dos Ligas más que los rojiblancos (10 frente a 8). La presencia atlética en los medios de comunicación era, por entonces, sólo ligeramente inferior a la de Real Madrid o Barcelona. Jesús Gil acertó al diagnosticar que los medios de comunicación estaban poco a poco girando todos sus focos hacia el Real Madrid y también, aunque en menor medida, hacia el FCBarcelona, y que eso haría que las diferencias económicas entre los dos grandes y el resto se incrementasen de manera exponencial. Sin embargo, aunque acertó en el diagnóstico, no lo hizo con el tratamiento.
A la pérdida de prestigio deportivo se han sumado los continuos escándalos económicos y financieros protagonizados por los dirigentes rojiblancos, la mezcla de sus intereses privados con los intereses deportivos del club del cuál son rectores, la turbia transformación del equipo en Sociedad Anónima, las opacas operaciones urbanísticas relacionadas con el estadio Vicente Calderón que concluirán con la mudanza rojiblanca la Estadio Olímpico (sic) de Madrid, las ventas de jugadores titulares sin disponer de sustitutos de garantía para los mismos y las adquisiciones de jugadores teóricamente contrastados que no dan el rendimiento que se espera de ellos. Todo esto ha provocado que poco a poco el grado de identificación de los seguidores rojiblancos con su equipo se haya resentido en estos últimos años. Por supuesto, siguen a su equipo y desean que gane, pero la mayor parte del tiempo permanecen en estado latente, sin apenas manifestarse. Fuera de Madrid fue curioso comprobar como en el pasado mes de mayo en muchas cafeterías, oficinas, colegios etc. de España se descubrieron aficionados atléticos, de los cuáles nadie sabía que lo eran: llevaban años esperando poder mostrar con orgullo cuáles eran sus colores, pero la falta de motivos proporcionados por su equipo y la avalancha mediática favorable a otros equipos les dificultaba dar el paso.
Tras las derrotas o fracasos rojiblancos la indignación llega a los foros, a twitter y a algún que otro blog, pero nunca a los grandes medios: en parte porque cada vez es menos sorprendente y en parte porque les da igual. Lo suyo es vender madridismo. El último ejemplo es reciente: la eliminación en la Europa League, en un grupo en el que estaban el Bayer Leverkusen, el Rosenborg noruego y el Aris de Salónica. Al día siguiente el espacio que se le dedicaba a esa eliminación en las portadas de los periódicos deportivos editados en Madrid era de apenas 10 centímetros cuadrados y los artículos realmente críticos se podían contar con los dedos de una mano. Ocupaban más espacio el posible fichaje de Rakitic o Mourinho vestido de astronauta. Hoy QSF calificael año de muy bueno: su equipo es sexto y está eliminado de Europa.
La realidad rojiblanca es una espiral negativa en la que todos colaboran: el equipo fracasa, entrenador y los jugadores buscan excusas, los medios lo justifican y buscan nombres con los que entretener a los atléticos, la afición es anestesiada y se resigna para no pasarlo aún peor y en cuanto hay un resultado aceptable se corre un tupido velo sobre todo lo anterior. ¿Y la directiva? Ahí sigue, 24 años después.

viernes, 17 de diciembre de 2010

Extraños caminos hacia la élite (ampliación)

Villas Boas y Hulk, entrenador y estrella del Oporto, tienen en común un exótico pasado

La historia futbolística del brasileño Hulk (Givanildo Vieira de Souza, 24 años), uno de los delanteros de moda del fútbol europeo, es cuanto menos curiosa: empezó a formarse como futbolista en el Corinthians Alagoano, un modesto equipo de la ciudad brasileña de Maceió, capital de estado de Alagoas, situado en el noreste de Brasil. Pese a su modestia, por este equipo pasaron también otras estrellas brasileñas que, casualmente o no, también llegaron a ser estrellas del Oporto: Deco y Pepe. Tras pasar sucesivamente por Corinthians, Vilanovense y Sao Paulo, dio el salto al profesionalismo en el Vitoria de Bahía siendo todavía menor de edad. Es más que  probable que su representante Teodoro Fonseca, con el que Hulk siempre se ha mostrado muy agradecido, tuviera algo que ver en todos estos movimientos y en los que se producirían a continuación.
Con apenas dieciocho años, y sin haber tenido casi tiempo para destacar en Brasil, se hizo con sus servicios el Kawasaki Frontale de la primera división japonesa. En su primera temporada en Japón disputó solamente una docena de partidos y en las dos siguientes fue cedido al Consodale Sapporo y al Tokio Verdy de la segunda división. En los 80 partidos que jugó en esas dos temporadas marcó más de sesenta goles. Sin embargo, en el Kawasaki siguieron sin contar con él y volvieron a cederle a Tokio Verdy, ya en la primera categoría japonesa, dónde siguió engordando sus cifras goleadoras. Su periplo japonés duró tres años, la mayor parte de los cuales los pasó jugando en la segunda división del país asiático.
Sorprendentemente, y gracias al buen hacer de su representante, en verano de 2008 el nombre de Hulk suena como futurible de los grandes de Portugal y también del Paris Saint Germain. El Oporto, cuya nómina de delanteros en aquel momento estaba compuesta sólo por Lisandro López y el Tecla Farías y que estaba a punto de traspasar a Quaresma al Inter, es el que, tras pagar más de 5 millones de euros por su traspaso se hace finalmente con sus servicios. Sus comienzos en el fútbol luso no fueron fáciles: Lisandro López era el delantero centro titular y Hulk se tuvo que adaptar a jugar en la banda o como segundo punta. Le costó, pero se hizo con un puesto en el once titular, formando delantera con el propio Lisandro. En la tercera plaza de la delantera se alternaban el uruguayo Cristian Rodríguez y el argentino Farías. Sus cifras goleadoras en su primer año en Oporto fueron discretas: 9 goles en 43 partidos. Fue en esa temporada cuando su nombre empieza a ser conocido en España: el Oporto elimina al Atlético de Madrid en los octavos de final de la Liga de Campeones y Hulk, aunque no marca en ninguno de los dos partidos, tiene una actuación destacada.
En el verano de 2009 Lisandro es traspasado al Olympique de Lyon y llega a Oporto procedente de River Plate Radamel Falcao. Pinto da Costa, consciente de que Hulk supondrá una importante fuente de ingresos para el Oporto en el futuro, renueva el contrato del brasileño hasta 2014, subiendo su cláusula de 40 a 100 millones de euros, la más alta de la historia en el fútbol portugués. Hulk comienza mejor la temporada que el año anterior, sus registros goleadores mejoran y en octubre de 2009 Dunga le hace debutar con Brasil. En esa época volvemos a tener noticias de él en España, pues el Oporto se encuentra de nuevo con el Atlético de Madrid, ahora en la liguilla de la Champions. En la ida no marca, pero protagoniza la jugada del primer gol que firma Falcao, y en la vuelta da otro recital en el Calderón firmando el 0-3 con un golazo desde la frontal del área.
Cuando parece definitivamente instalado en la élite, sucede algo inesperado: el 20 de diciembre de 2009 se ve envuelto en una trifulca en el túnel de vestuarios del estadio de La Luz tras un partido de la Liga Sagres contra el Benfica. Es acusado de agredir a un comisario de seguridad, por lo que se le sanciona con seis meses de suspensión. No podría volver a jugar ni la Liga ni la Copa de Portugal en lo que quedaba de temporada. Afortunadamente para él, en marzo se le rebaja la sanción y puede volver a jugar en el tramo final de la temporada, pero ese parón de tres meses y el mal final de temporada del Oporto le cuesta el Mundial y, probablemente, aborta un traspaso a un grande del fútbol europeo.
Esta temporada está siendo la de la explosión definitiva de Hulk: lleva diez goles en diez partidos de Liga, ha sido la estrella indiscutible del histórico 5-0 del Oporto al Benfica y ha sido nombrado mejor jugador de la Liga Sagres en septiembre y en octubre. No nos equivocaremos si apostamos a que el año que viene jugará en un grande europeo. Pinto da Costa ya se frota las manos.

Pero si extraño ha sido el camino recorrido por Hulk para llegar a la élite no lo ha sido menos el de su actual entrenador: André Villas Boas. Perteneciente a una familia de nobles portugueses, hijo de un portugués y una inglesa, cuando era un adolescente dominaba el inglés y el fútbol era su pasión. Su familia residía cerca del lugar donde tenía su domicilio Bobby Robson en su época de entranador del Oporto y André, con diecisiete años, se puso en contacto con el inglés para mostrarle su opinión acerca del delantero Domingos Paciencia (hoy técnico del Sporting de Braga). Robson quedó encantado con sus consejos y le recomendó hacer el curso de entrenador. En ese momento la vida de André Villas Boas cambió radicalmente: en vez de matricularse en la universidad para hacer una carrera relacionada con las letras, su plan inicial, decidió seguir los consejos del inglés. En Portugal no podía hacer el curso de entrenadores pues no había cumplido la mayoría de edad. En Inglaterra tampoco podía, pero Robson tiró de contactos y Villas Boas pudo hacer el curso de entrenador en la escuela inglesa de entrenadores de Lilleshall. Cumplido el trámite burocrático entró a formar parte del equipo de colaboradores de Robson, para el que empezó a hacer informes técnicos sobre los rivales, y a entrenar a equipos de las categorías inferiores del Oporto. Allí conoció a otro hombre clave en su carrera: José Mourinho. Posteriormente Villas Boas completó su formación con otro curso de formación en Escocia y se hizo con las licencias C, B y A de la UEFA.
Gracias a sus contactos británicos, en el año 2000 es nombrado director de desarrollo de jóvenes promesas de la selección de las Islas Vírgenes y entrenador del equipo nacional caribeño. Dura menos de un año en el cargo y es despedido por sus malos resultados, volviendo a trabajar en las categorías inferiores del Oporto. Cuando Mourinho llega al Oporto, recluta a Villas Boas para que realice el scouting de los rivales y de las posibles incorporaciones. Su labor no se limitaba a ver vídeos y sacar conclusiones: aprovechaba su anonimato para presentarse en los entrenamientos de los rivales, llegando a ver hasta cuatro y cinco entrenamientos semanales y pasándole luego la información a Mourinho.
El hoy entrenador del Real Madrid valora tanto su labor que se lo lleva con él a Londres, llegando a decir entonces de Villas Boas en el diario The Independent que “él es mis ojos y mis oídos”.
Cuando Mourinho es contratado por el Inter de Milán se lleva a Italia a su equipo habitual de trabajo, Villas Boas entre ellos. El actual entrenador del Oporto realiza una labor similar a la que venía haciendo en el Chelsea y la relación entre ambos es fluida hasta el mes de abril de 2009. Villas Boas le dice entonces a Mourinho que quiere dejar de ser un colaborador más para pasar a ser su adjunto. “The especial one” no se toma bien la propuesta, ficha a José Morais para que se haga cargo de las funciones de Villas Boas y relega a éste al ostracismo. La relación entre ambos se enquista y Mou quiere deshacerse entonces de Villas Boas. Algunos medios portugueses señalan que Mourinho llegó a filtrar que, en realidad, Villas Boas “sólo daba forma a la información, porque donde era realmente bueno era en la parte informática”. El problema para Mourinho es que el contrato de Villas Boas le vinculaba al Inter durante tres años más, de manera que tiene que seguir conviviendo con él en el club hasta que, en octubre de 2009, el Académica de Coimbra, por entonces último en la liga portuguesa, realiza una oferta a Villas Boas para que sea su primer entrenador. Éste llega a un acuerdo con el Inter y rompe su contrato cobrando un solo año de indemnización. Su debut como primer entrenador se produce, curiosamente, en Oporto, donde el Académica cae derrotado por 3-2 ante su equipo actual, en un partido que dicen las crónicas que estuvo marcado por un polémico arbitraje.
Logra salvar con comodidad al Académica de Coimbra, al que clasifica décimo primero y su nombre suena como futurible del Sporting de Lisboa. Se llega a publicar incluso que tiene un acuerdo con el equipo de la capital lo que es calificado por Villas Boas como “una payasada”. Cuentan los medios portugueses que los directivos del Sporting se sienten ofendidos por esas declaraciones y se echan atrás en su decisión de contratar a Villas Boas.
En esa misma época, en la primavera de 2010, el Oporto pasa por un periodo difícil tras sufrir una de las derrotas más dolorosas de su historia, al caer por 5-0 ante el Arsenal y perder posteriormente todas sus opciones de ganar la Liga. Pinto da Costa toma la decisión de contratar un nuevo entrenador para la temporada 2010-11 que sustituya a Jesualdo Ferreira. Suenan dos nombres: uno de prestigio y totalmente contrastado como Luiz Felipe Scolari y el otro una apuesta fuerte, André Villas Boas. De esta forma, y en medio de grandes dudas por parte de los aficionados, Villas Boas se convierte en el entrenador más joven de la historia del Oporto.
En ese momento las comparaciones con Mourinho son inevitables: hay quién dice que es un clon del ya entrenador del Real Madrid. Otros, no pocos, dicen que es un mal clon. Villas Boas se desmarca de esta comparación afirmando que, si de alguien se puede considerar un clon, es de Bobby Robson, pero nunca de Mourinho. “No tenemos el mismo carácter ni la misma personalidad. Tenemos formas diferentes de comunicar y trabajar”, afirma. Mourinho no se queda atrás y compara la experiencia que él había acumulado en el Benfica y en el Uniao de Leiria antes de entrenar al Oporto con el escaso bagaje de Villas Boas, que contesta al ya campeón de Europa que su opinión vale para él lo mismo que la de cualquier otro. No contento con eso, no se arredra y multiplica su apuesta afirmando sobre sí mismo y su situación que “un entrenador de 33 años que no gane la Liga con el Oporto el primer año debe darse la vuelta e irse a otro lado”.
Hoy el Oporto es líder destacado de la Liga portuguesa con una ventaja sideral sobre sus perseguidores, sólo ha cedido dos puntos en las diez primeras jornadas de liga (Mourinho en el mismo periodo se dejó seis en su primera temporada con el equipo blanquiazul) y ha conseguido la mayor victoria de su historia contra el Benfica. Además, es líder de su grupo en la Europa League y ya está clasificado para la segunda fase. Todo esto lo ha conseguido Villas Boas con un equipo, a priori, más débil que el del año pasado: Bruno Alves se marchó al Zenit y Meirelles al Liverpool. Aunque se realizaron seis fichajes, de ellos solamente Moutinho es titular habitualmente. Jugadores secundarios como Maicon, Belluschi o Sapunaru son ahora jugadores clave y las estrellas, como Hulk o Falcao, se están convirtiendo en superestrellas. Lo mismo que sucedía en el Oporto de Mou: otra similitud más. A Villas Boas le molestan las comparaciones pero, en este caso, son inevitables.

lunes, 13 de diciembre de 2010

Seis días sin Barça

Los aficionados culés contamos las horas que quedan hasta el próximo partido

Hace menos de un década el barcelonismo pasaba por una situación opuesta a la actual. Una época en la que los Rochemback, Geovanni, Christanval y otros lucían la camiseta blaugrana y, cuando jugaba el Barça, los bares no estaban llenos de gente ilusionada y expectante como ahora. En su lugar sólo estábamos allí el camarero, dos o tres culés resignadamente fieles a la espera de nuestro castigo semanal y tantos o más madridistas con ganas de pasar un buen rato a costa nuestra.
Nada que ver aquélla situación con la actual. Los aficionados de FCBarcelona contamos hoy no ya los días, sino las horas que nos restan para poder volver a disfrutar con el juego del equipo. Para gozar de nuevo con los goles y los regates de Messi, con la generosidad y las diagonales de Villa, con el esfuerzo ejemplar y las carreras de Pedro, con la precisión de cirujano de Xavi, con las danzas balompédicas de Iniesta, con el fino toque y el perfecto posicionamiento de Busquets, con los viajes de ida y vuelta de Alves, Abidal o Maxwell, con la contundencia y el riesgo controlado a la hora de sacar la pelota de Piqué o Puyol, con el mando, la tranquilidad y el oportunismo de Valdés y con la vital participación de los canteranos y de secundarios como Bojan, Keita, Mascherano o Milito, que no desmerecen de los actores principales.
Es tiempo de disfrutar. DISFRUTAR con mayúsculas, más allá de los resultados, por más que éstos sean también un motivo de alegría. Porque llegarán resultados adversos, como llegaron el año pasado contra Sevilla en Copa o Inter en Champions, no siempre se ganará. A lo peor incluso no se gana nada. Un rival que se atraganta, una decisión arbitral polémica o una mala racha de lesiones pueden evitar la consecución de títulos, pero la satisfacción de ver jugar cada tres cuatro o cinco días a este grupo de jugadores quedará: la impaciencia al mirar el calendario para ver cuando juega el Barça, los noventa minutos delante de la televisión presenciando jugadas que uno no es capaz de imaginar desde su sofá, leer durante el desayuno del día siguiente alguna crónica o post brillantes... Placer antes, durante y después. Porque, por más que digan por ahí, lo que da la alegría de verdad en el fútbol, no son los títulos, sino las sensaciones que un equipo deja. ¿Qué día hubo más alegría: el del 2-6 o el día que el Madrid pierde en Villarreal y el Barça fué campeón? ¿El día del gol de Iniesta en Stamford Bridge o el de la final de Roma? Pues eso. La identificación con una manera de hacer las cosas y el orgullo que se siente al pensar “Esos son los míos” es lo que hace que uno se sienta dichoso gracias a su equipo. Los títulos son la guinda, pero la base es lo anterior.
Los eufóricos tiempos que vivimos hoy un día no durarán eternamente, vendrán tiempos buenos a secas o, a lo peor, malos. Es ley de vida y ley de fútbol. No nos arrepintamos entonces de no haber disfrutado lo suficiente hoy y, sobre todo, no dejemos que algunos rufianes nos estropeen este momento. Estos seís días sin Barça servirán para que los jugadores cargen las piernas y serán muy rentables a medio plazo, pero a muchos se nos harán eternos.


miércoles, 8 de diciembre de 2010

Cortoplacismo

La diferencia entre las canteras de Barça y Real Madrid no es de calidad, sino de oportunidades. La obsesión por conseguir títulos de forma inmediata dificulta el salto de jóvenes valores.
                                   

Con motivo de la presencia de tres canteranos barcelonistas: Iniesta, Xavi y Messi, en el podio del Balón de Oro 2010 el debate futbolísiticos ha girado en los últimos días en torno al diferente uso que de sus canteras dan los dos grandes del fútbol español.
Lo primero que hay que decir es que de ambas canteras sólo se puede hablar bien. Ambas son excelentes y fructíferas escuelas de formación, cuentan con experimentados ojeadores y equipos técnicos competentes. Enumerando sólo jugadores que sigan en activo, entre los de la Masía encontramos jugadores internacionales como Messi, Iniesta, Xavi, Cesc, Puyol, Piqué, Busquets, Pedro, Valdés, Bojan o Reina. Por su parte, en este periodo la fábrica blanca ha producido jugadores de alto nivel como Raúl, Guti, Casillas, Soldado, Negredo, De la Red (es justo contar con él aunque esté  retirado), Mata, Negredo, Granero, Filipe Luiz, Arbeloa, Borja Valero, Jurado o Diego López.
La principal diferencia entre una cantera y otra no es de cantidad ni de calidad, sino de uso. Mientras que en el FCBarcelona hasta 8 o 9 canteranos forman parte habitualmente de las alineaciones, en el Real Madrid de hoy sólo Casillas es titular indiscutible, Arbeloa participa con frecuencia y Granero rellena la plantilla para tener el número mínimo de jugadores nacionales que exige la UEFA, cuando Valero, Negredo, Soldado, Filipe Luiz o Mata son jugadores que perfectamente podrían formar parte del primer equipo del Real Madrid.
¿Por qué hay entonces una presencia tan escasa de canteranos en el Real Madrid, cuando su cantera sigue produce talentos continuamente? La escasez de miras de sus dirigentes tiene la culpa: en el Real Madrid se ha impuesto en los últimos años la creencia, jaleada por los medios afines, de que lo único que vale no es ganar, sino ganar ya. Un año sin títulos es un año perdido, un fracaso. Y poco importa el cómo, el juego, sólo cuenta el triunfo o la derrota.
¿Qué hacer si no se gana nada durante una temporada? Gastarse lo que haga falta para "asegurar" la consecución de títulos al año siguiente. Para ello se construyen plantillas amplias con todas las posiciones dobladas: si se juega con dos centrales y en la primera plantilla ya hay cuatro ¿Qué posibilidades tiene un central del filial de tener su oportunidad? Evidentemente ninguna. ¡Cuanto daño ha hecho la obsesión por una plantilla amplia a las canteras españolas! Por otro lado, ¿qué sucede con un entrenador que no consigue títulos? A la calle con él. Sabiendo que su proyecto será evaluado de forma absoluta e inmisericorde a final de temporada, si es que llega, es difícil que nadie se atreva a dar la oportunidad a un joven del filial, sobre todo si en su plantilla cuenta ya con 22 jugadores internacionales cuyo coste anual (amortización + sueldo) es más que importante y es continuamente recordado por el entorno. Si no se piensa a dos, tres o cuatro años vista es imposible que se cuente con jugadores que no darán su máximo hasta pasado un cierto periodo de adaptación.
En una época de crisis económica como la que estamos viviendo, contar con una buena cantera y administrarla correctamente supondrá en los próximos años un factor diferencial. De hecho, lo está siendo ya. Mirando la clasificación vemos como el Barça es líder, y equipos como Villarreal, Español, Real Sociedad, Mallorca o Athletic que, por voluntad propia u obligados por las circunstancias, han apostado por la cantera ocupan posiciones de privilegio. También el Betis en segunda o el Sevilla en tiempos no lejanos. La opción es clara: o cantera, o deudas inasumibles.

domingo, 5 de diciembre de 2010

Dos casos de manual

El comportamiento de los directores de los dos periódicos deportivos madrileños es un ejemplo claro de lo que en psicología se conoce como proyección

En el ámbito de la psicología se define la proyección como un mecanismo de defensa a través del cual el individuo se enfrenta a conflictos emocionales y amenazas de origen interno o externo atribuyendo incorrectamente a los demás, sentimientos, impulsos o pensamientos propios, que le resultan inaceptables o que le generan negación. Es en palabras llanas, la proyección consiste en acusar a los demás de tener defectos que no sólo no tienen, sino que además son defectos propios de quién acusa. Para entender mejor en qué consiste veremos dos ejemplos.
Pep Guardiola es acusado con frecuencia de que su actitud, correcta y respetuosa en el 99,9 % de los casos, no es más que una pose y que dentro de él hay un ser autoritario y pedante, que se cree por encima del resto del universo, egoísta, altivo y que odia todo lo que no sea él y su entorno. En definitiva, un personaje que bajo una apariencia moderada y culta esconde un fanático radical.

Uno de los que hace esa acusación es el director del diario As, Alfredo Relaño, persona a la que con frecuencia se tiene por moderado, correcto y culto y que en el fondo, no es más que un radical empeñado en hacer todo lo posible por que su equipo, y el equipo de cuyo resultados dependen las ventas de su periódica, gane. Y para que esto sucede hace todo por desestabilizar al máximo rival, inventando todo tipo de absurdas conspiraciones si hace falta. Él sabe que en su día estaba considerado como un periodista de prestigio (a él debemos grandes programas como El Día Después y fue el padre de los prestigiosos deportes de Canal +) y en el fondo no está orgulloso de aquello en lo que se ha convertido, por lo que proyecta en Guardiola sus propias vergüenzas.
Eduardo Inda, en cambio, no responde a la definición de correcto, respetuoso ni mucho menos de culto pero, a su manera, también proyecta debilidades propias en Guardiola. En su famosa carta abierta a Guardiola del pasado mes de febrero acusaba al técnico catalán de divino, de inseguro, de engolado, y de demagogo, entre otras cosas. Él, Eduardo Inda, es el que se cree por encima del resto de la humanidad por haber llegado un cargo con el que jamás podía haber soñado. Además, es consciente de que si está ahí es porque le sostiene Pedro J., que cualquier día se aburrirá de él como se aburrió por ejemplo de Melchor Miralles, y volverá a ser un don nadie. Eso le provoca inseguridad. Que Eduardo Inda es además engolado y demagogo no hace falta explicarlo, porque lo evidente no requiere ser demostrado.
También acusó Inda a Guardiola de ponerle en la diana utilizando tácticas nazis, cuando Guardiola dijo que expresiones como “parar a Messi por lo civil o por lo criminal”, utilizadas por Inda, terminarían provocando una lesión del argentino. ¡Inda acusando a alguien de poner en práctica tácticas nazis! Él, que deshumanizó y organizó todo tipo de campañas contra Pellegrini hasta que consiguió cargárselo. Él, que utiliza la portada de su periódico para poner en el ojo de huracán a árbitros  o jugadores cuando le viene en gana.
Finalmente, cada cierto tiempo Inda saca a relucir su palabra favorita: el canguelo, con la que quiere reflejar un supuesto miedo al Real Madrid por parte del FCBarcelona debido a no se sabe que extraños motivos y con la que pretende desestabilizar al Barça y su entorno. Con poco éxito, también es cierto. No es más que otro mecanismo de proyección: miedo es el que tiene él a que los éxitos del Barça se prolonguen en el tiempo y todos sus esfuerzos caigan en saco rato.
Y para que los éxitos culés no se prolonguen, ambos, Inda y Relaño, quieren cargarse a la pieza clave. A Guardiola. ¿Cómo hacerlo? Haciéndole vivir un ambiente tan irrespirable que al final a Guardiola le compense más quedarse en casa que estar luchando día a día. Vertiendo sobre el catalán acusaciones absurdas como que es capaz de cambiar la hora de un partido y poner a la opinión pública en su contra utilizando para ello unos caracteres tipográficos de un tamaño nunca visto antes en sus páginas web, ni siquiera cuando España ganó el Mundial. Guardiola está resignado a que va a seguir teniendo que convivir con estas campañas pero también sabe que tienen una vertiente muy positiva: sus jugadores se motivan ante estas agresiones externas y el barcelonismo está más unido que nunca. Y mientras estas circunstancias se den, hay Barça para rato.