lunes, 17 de mayo de 2010

Dedicatoria

A todos aquellos que han hecho que la alegría por conseguir la Liga sea mayor

Como persona generosa que soy quiero compartir mi alegría por el título de Liga del Barcelona con los siguientes colectivos/personas:
Con los del canguelo y la conjura de los 98 puntos. Al final, ni uno, ni otro. Conociéndoles, tropezarán más veces con la misma piedra.
_Con los del Villarato y el clavo ardiendo, versión moderada de los anteriores. No ganaron la nada, pero aprendieron lo que es el punto de fuga.
_Con los que auguraban un fin de ciclo. Me siento orgulloso de mi mismo por no haber utilizado en este epígrafe la palabra francés ni la palabra sucio. No hay tontos suficientes en España que tenemos que importarlos.
_Con Sergio Ramos, que si se rizase el pelo la Bruja Lola vería peligrar su puesto.
_Con Florentino Pérez, porque con una modesta inversión ha conseguido que su equipo repita los logros de la temporada anterior. Y porque sigue siendo un ídolo entre sus aficionados tras sumar su cuarto año sin títulos. Y porque, si ficha a Mourinho, habrá cumplido su objetivo: hacer del Madrid el equipo más odiado del mundo. En resumen, FP es al fútbol lo que ZP a la política.
_Con Jorge Valdano, por su bonito detalle con Gaby Milito.
_Con el Español, que hizo lo que pudo, coño.
_Con Undiano, ese héroe con el que el Barça acaba siempre con las mismas tarjetas que el contrario aunque haga la mitad de faltas.
_A Eduardo Inda, como segundo consuelo por no haber anunciado con medio año de antelación quién ganaría la Liga. El primer consuelo es que, por fin, se ha cargado a Pellegrini.
_Al jefe de deportes de Veo Televisión, por decir que Sergio Busquets y Touré erán dos problemas para el Barça. Ah, y porque el pobre no es capaz de ponerse bien una corbata.
_A José Vicente Hernáez, que estará haciendo sumas y restas para demostrar que al Barça le han regalado la liga.
_Y a Tomás Roncero, porque alguien que se atreve a escribir que quiere más a su hijo que a las Copas de Europa del Madrid, como si fuera algo extraordinario, bastante tiene con lo que tiene.