jueves, 27 de octubre de 2011

Los inconvenientes de la excelencia

Algunas alarmas han saltado en el barcelonismo ¿hay motivo?

El Barça no es intenso en la presión, hace circular el balón con lentitud, no crea ocasiones con la misma facilidad que antes y Messi es el de Argentina. Un partido empatado en el que el portero rival fue el héroe y dos ganados pero no por goleada han hecho saltar algunas alarmas en el entorno del Barça. Encontrarse en la clasificación un punto por debajo del Real Madrid también ha contribuido a acrecentar la preocupación. Sin dejar asumir como una evidencia que el Barcelona no se encuentra en el mejor momento de forma de la temporada, que indudablemente está por llegar, creo sinceramente que detrás de la crítica subyace una cualidad común a todo aficionado al fútbol: el resultadismo.

De todos los partidos disputados por el Barça en lo que va de temporada es razonable diagnosticar relajación y lentitud en el movimiento de balón en la segunda parte de San Sebastián. En el resto de partidos el equipo ha sido totalmente reconocible, con mayor o menor acierto o chispa, pero sin perder ni la intensidad ni la identidad. Se critican los partidos jugados contra Milan, Sevilla o Granada: partidos empatados o ganados por la mínima. ¿Cuántos tiros realizó el Barça en estos partidos? 21 contra el Milan, 17 en Granada y 22 contra el Sevilla. ¿Cuántos realizó en las goleadas? 18 Villarreal y Osasuna y 17 contra el Atlético. La historia de siempre: el resultado condiciona la mayoría de los análisis, los cuentagoles jamás se equivocan.
Me he permitido comparar las estadísticas del Barça en cuanto a remates efectuados (totales) y remates (a puerta) recibidos en las cuatro temporadas que Guardiola lleva dirigiendo a los blaugrana. Los resultados se muestran en la siguiente tabla:


Sin ánimo de ser muy exhaustivo, de los datos adjuntos se pueden extraer las siguientes conclusiones:
1_ No hay ninguna evidencia de que el Barcelona remate menos esta temporada de lo que lo hacía en las dos anteriores. Al contrario, remata más de lo que remataba en 09-10 y en la 10-11 tanto en Liga como, sobre todo, en Champions.
2_ Al Barcelona le rematan menos de dos veces a puerta por partido en Liga y sólo una en Champions. Incluso le rematan menos a puerta que en cualquiera de las temporadas anteriores. No parece muy razonable acusar a un equipo que recibe menos de dos tiros a puerta por partido de relajación o falta de intensidad.
3_ La mayor media de tiros efectuados en Liga se da en la primera temporada de Guardiola. La causa es evidente: el factor sorpresa. El Barcelona arrolló durante más de una vuelta esa temporada hasta que los equipos contrarios idearon fórmulas más o menos efectivas para intentar frenar a los blaugrana. Por decirlo de forma simple, durante más de medio año, había partido: ambos equipos querían ganar y los espacios abundaban. Desde entonces, salvo contadas excepciones, hay medio partido o un partido a medio campo: el que realiza el Barça intentando atacar contra equipos cuya único objetivo es dificultar ese ataque. Equipos cuyos laterales jamás pasan del centro del campo y que fían todo su ataque a jugadas a balón parado o a desafíos de uno o dos jugadores contra el mundo.

Otro dato: el Barça llevaba 19 goles y 6 en contra en las 9 primeras jornadas de la temporada anterior. En la 09-10 llevaba 24 y 5. En la 08-09 28 y 8. En la presente lleva ¡27 a favor y 4 en contra! ¡Sólo un gol menos a favor que en la primera temporada de Guardiola y menos en contra que en cualquiera de las anteriores!.

El nivel de exigencia es tan alto que muchas veces se olvida que estamos ante competiciones deportivas de primer nivel en la que lo extraordinario debería ser que un equipo pase por encima del otro. El Barça ha protagonizado tantos recitales en los últimos años que ha convertido lo extraordinario en habitual, provocando que muchos interpreten la emoción en el marcador como un síntoma de debilidad. Olvidados están aquellos tiempos en los que un viaje a Málaga, Bilbao o Getafe era casi sinónimo no ya de sufrimiento seguro, sino de muy probable derrota. Son los inconvenientes de la excelencia.

Nota: los datos están sacados de la web oficial del FCBarcelona